Tratamiento quiropráctico de calcificaciones

El cuerpo humano tiene dos tipos de tejidos: el tejido duro (que corresponde a los huesos) y el tejido blando (que corresponde al resto del cuerpo, ya sea sangre, venas, músculos, órganos, etc.).

La calcificación

La calcificación aparece cuando el calcio se acumula en el tejido blando y, como consecuencia, este pierde elasticidad. Con el movimiento, al no tener elasticidad, aparece el dolor, la inflamación, la irritación, etc.

La calcificación se produce por falta de movimiento de las articulaciones. Las calcificaciones se producen con lento paso del tiempo y van aumentando con los años. Esto es lo que se conoce como proceso degenerativo. Como consecuencia todos los síntomas (especialmente el dolor) y limitaciones (falta de elasticidad, dificultades de movimiento) van aumentando.

La Quiropráctica es una profesión que trabaja con el tejido duro del cuerpo (especialmente con la columna vertebral) para mantener y fomentar su completa movilidad. En los últimos años, en las universidades donde se enseña Quiropráctica, también se forma a los quiroprácticos en técnicas centradas en las extremidades, donde se producen gran parte de las calcificaciones.

Al ajustar y mantener las articulaciones en su lugar, la Quiropráctica fomenta que recupere su movimiento anterior. Con ello se logra que el tejido blando de la articulación pueda estirarse y contraerse de forma normal, lo que aminora la acumulación de calcio.